lunes, 4 de mayo de 2009

Bound for glory, 1976 Hal Ashby

Biografía del grandísimo Woody Guthrie dirigida por uno de los directores más escondidos del cine americano, Hal Ashby. Ashby es un director no muy conocido y con algunas películas excelentes como esta misma, 8 millones de maneras de morir o El regreso. Murió demasiado pronto y dicen las malas lenguas que su corta producción cinematográfica se debió a cierta politoxicomanía. Su interés por la música no sólo se ve en una aproximación a la vida del cantautor americano cuidada y mimada en sus aspectos melódicos, sabed que realizó el concierto que quizás mejor capta la realidad de los Stones en directo: Lets spend the night together.
Si, mas lograda que la de Scorsese. Pero eso es otra historia.

Parece ser que es bastante fiel a la realidad y la implicación total de la familia de Guthrie así lo demuestra. Tambien es importante al respecto que el guión está basado directamente de la autobiografía escrita por el propio músico.

Técnicamente es preciosa y destaco ya no sólo al propio Ashby su trabajo con los actores o el montaje de la peli (dura más de dos horas y, al igual que Bird de Eastwood, cuando acaba tienes la sensación de que te habrías quedado otras dos viendo la vida de este tío) sino también el excelente trabajo de Haskel Wexler con la fotografía, con la que no en vano ganó un Óscar.

Esta es de esas pelis que hablan de héroes. Woody Guthrie fue un héroe. Para él vida y arte son inseparables y la máxima de Buñuel de "la necesidad de comer no justifica la prostitución del arte" es un buen ejemplo de lo que fue su vida.

Ver esta peli te hace sentir bien y por supuesto te plantea cosas.
Los genios no tienen derecho a malgastar su vida ni a ser egoístas.


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